Comunicación paciente – dentista

¿Por qué es importante la comunicación? El miedo es temor a lo desconocido. Si sabes qué es lo que te ocurre, cómo se soluciona y qué es lo que te vas a encontrar, es más fácil que ese temor se disipe. De la comunicación surge la confianza, y si hay confianza es mucho más fácil conseguir un estado de relajación.A nadie le gusta el dentista. Esto es así. Es una situación desagradable. No se puede ver lo que te están haciendo, te sientes inmovilizado… puedes llegar a pensar que has perdido el control sobre la situación.
Por eso vuelvo a insistir: comunicación.

Hay que explicar al paciente absolutamente todo lo que vamos a hacer, aún más si es un niño, con un tono de voz suave. El paciente debe tener siempre el control. Si levanta la mano porque quiere parar, el dentista debe parar y preguntarle qué le ocurre. Si no lo hace, se romperá la relación de confianza.

Nunca mentir u ocultar la realidad. Explicar qué se espera del tratamiento, cómo creemos que va a responder, anticiparnos a los posibles resultados y despejar todas las dudas. Sólo así conseguiremos que el paciente confíe en nuestras manos.